Búsqueda personalizada
Busca en mis Blogs

sábado, 30 de agosto de 2008

HISTORIA DEL SOL Y LA LUNA


Cuando el Sol y la Luna se encontraron por primera vez se enamoraron perdidamente y desde ahí comenzaron a vivir un gran amor. El mundo aún no existía y el día que Dios decidió crearlo, les dio un toque final, el brillo. Dios decidió que el Sol iluminaria el día y que la Luna iluminaría la noche, por ese motivo estaría obligados a vivir separados. Ambos fueron invadidos por una gran tristeza y cuando se dieron cuenta que nunca más se encontrarían, la Luna fue quedándose cada vez más triste. A pesar del brillo dado por Dios, ella se sentía sola. El Sol a su vez, había ganado un titulo de nobleza “ASTRO REY”, pero eso tampoco le hizo feliz.


Dios viendo esto los llamo y les explicó:


Tú, Luna, iluminaras las noches frías y calientes, encantaras a los enamorados y serás frecuentemente protagonista de hermosas poesías.


En cuanto a ti, Sol, mantendrás ese titulo porque serás el más importante de los astros, iluminar la tierra durante el día, darás calor al ser humano y solo eso hará a las personas más felices.


La Luna, más triste se puso con ese cruel destino y lloró amargamente, y el Sol al verla tan triste, decidió que no podía ser débil, ya que debía darle fuerzas y ayudarla aceptar lo que Dios había decidido.


Aún así, el estaba tan preocupado que decidió pedirle algo a Dios:


Señor, ayuda a la Luna, por favor, es más frágil que yo, no soportará la soledad. Y Dios en su gran compasión, creo las estrellas para hacerle compañía a la bella luna. La Luna siempre que está triste recurría las estrellas que hacen de todo para consolarla, pero casi nunca lo consiguen.


Hoy ambos viven así, separados, el Sol finge que es feliz y la Luna no puede simular su tristeza. El Sol arde de pasión por ella y ella vive en las tinieblas de su pena. Dicen que la orden de Dios era que la Luna debería ser siempre llena y luminosa, pero no lo logró, porque es mujer y la mujer tiene fases, cuando es feliz, consigue ser llena, pero cuando es infeliz es menguante, ni siquiera es posible apreciar su brillo.


Luna y Sol siguen su camino, él solitario pero fuerte y ella, acompañada de las estrellas, pero débil. Los hombres intentan constantemente conquistarla, como si eso fuese posible. Algunos han ido incluso asta ella, pero han vuelto siempre solos. Nadie jamás ha conseguido traerla hasta la Tierra, nadie ha conseguido realmente conquistarla por más que lo intentaron.


Sucede que Dios decidió que ningún amor fuese en este mundo imposible, ni siquiera el de la Luna y el Sol, fue en ese instante cuando él creo el eclipse. Hoy Sol y Luna viven esperando ese instante, esos momentos que les fueron concedidos y que tanto cuestan que sucedan.


Cuando miréis al cielo, a partir de ahora y veáis que el Sol cubre a la Luna es porque el Sol se acuesta sobre ella y comienzan a amarse, es a ese acto de amor el que se le dio el nombre de eclipse. Es importante recordar que el brillo de su éxtasis es tan grande que se aconseja no mirar al cielo en ese instante, vuestros ojos pueden cegarse al ver tanto AMOR.


Ahora ya sabéis, esta es la bella historia del Sol y la hermosa Luna, esa historia que fue capaz de erizar tu cuerpo, al pensar que puede ser vuestra historia de AMOR...

No hay comentarios: